C. Pradera, Barcelona, 11-08-2015
La miércoles pasado estuve en un cliente que tiene un problema recurrente de ratas. Hace dos años nos llamaron porque oían ruidos en el falso techo de la planta baja. Es un edificio de la década de 1960 en Terrassa. Los sobretechos son de escayola y solo hay acceso por las pequeñas oberturas de los ojos de buey. Pegado al edificio hay una vieja nave industrial ocupada. Hice tapar algunos agujeros que daban a la fábrica. Pero no fue suficiente. En la primera visita puse rodenticida en el falso techo y se solucionó. Desde entonces voy detectando la entrada puntual de ratas.
Nunca se ha visto nada. Solo se oye puntualmente alguna rata. Pero sí se huelen a veces a descomposición de cuerpos. Y esto implica que luego aparezcan moscardas. Ejemplo de lo dicho es lo que muestran las imágenes 1 y 2. Corresponden a una habitación con estanterías donde se guardan productos. Es la habitación que queda más cerca a la fábrica. Sobre las estanterías se acumulan moscardas. He recomendado su limpieza, pero allí hay ejemplares de por lo menos dos años. Esto es muy interesante porque me interesan las moscardas de la carne.
De hecho, el miércoles estaba revisando el consumo de cebo en el falso techo de esa habitación cuando me pregunté qué especies de moscarda debían haber. Observé dos de diferente tamaño y color (figura 3). La de mayor tamaño era alguna especie del género Sarcophaga (Sarcophagidae). En la imagen número 4, se puede ver uno de los ejemplares recolectados. Las llamamos de manera genérica como moscarda gris de la carne. Es difícil su determinación y no me he metido en ello. Son más de 70 especies de este género que tenemos en la Península Ibérica [1]. No me interesa por el momento.
La otra especie de menor tamaño era más abundante. Tenía el tórax y el abdomen de color azul y verde. Se trata de Chrysomya albiceps, un califórido (Calliphoridae) común en cadáveres. En las imágenes 5 a 7 se puede ver detalle de esta especie, así como la imagen del ala. Hay otra especie del mismo género que también es común, Chrysomya megacephala [2]. Para diferenciar ambas especies basta mirar el color del espiráculo anterior, blanco en albiceps y oscuro en megacephala [3].
Pues bien, lo anterior me sirve para darme cuenta de la variabilidad geográfica en cuanto a moscardas de los cadáveres. En la ciudad de Barcelona, la mosca común que uno encuentra sobre cadáveres de ratas y ratones es Calliphora vicina [4]. No falla. También encuentro de otros géneros como Sarcophaga, Lucilia y Chrysomya, pero más hacia la zona periurbana. En cuanto a Sarcophaga, abunda en zona periurbana y más allá. Apunto que esto es una observación personal. No me he planteado hacer un registro de ello.
También en la ciudad de Barcelona está en expansión Synthesiomyia nudiseta, una mosca exótica perteneciente a la familia Muscidae [5]. Es de origen tropical y se ha introducido en Europa por el Mediterráneo. Este invierno la encontré sobre una rata de campo (Rattus rattus) que quedó muerta en el interior de un edificio de Montjuic.
Notas:
[1] Miguel Carles-Tolrá (coord.). 2002. Catálogo de los Diptera de España, Portugal y Andorra (Insecta). Sociedad Entomológica Aragonesa, Zaragoza. Monografías, 8. 323 p.
[2] C. Pradera. 15-10-2019. Chrysomya megacephala (Diptera, Calliphoridae) en Barcelona. El desinsectador y desratizador.
[3] Krzysztof Szpila. 201X. Key for identification of European and Mediterranean blowflies (Diptera, Calliphoridae) of forensic importance Adult flies. Nicolaus Copernicus University. 18 pp.
[4] C. Pradera. 11-10-2012. Moscarda azul Calliphora vicina (Diptera, Calliphoridae). El desinsectador y desratizador.
[5] C. Pradera. 20-10-2016. Moscarda Synthesiomyia nudiseta (Diptera, Muscidae) en Badalona. El desinsectador y desratizador.