Vídeo 1. Detección de primer avispero de Vespa orientalis en Barcelona.
C. Pradera, Barcelona, 26-09-2022
La búsqueda
Cuando en 2016 tuve la suerte de encontrar en Barcelona la especie de hormiga Pheidole megacephala [1], mi grado de búsqueda aumentó. Todo aprendizaje tiene su camino. Me di cuenta de que muy pocos nos parábamos a mirar qué animales tenemos a nuestro alrededor. Y no solo a mirarlos, sino a identificarlos correctamente y conocer un poco más sobre ellos. La correcta identificación no es fácil. He cometido errores a manta. Además, un año ves imposible meterte en un grupo por su dificultad. Y al año siguiente, te metes en ello.
Con el tiempo intenté orientar un poco mi búsqueda. Por ejemplo, una noche en Almería recorrí varios parques en búsqueda de la cucaracha Periplaneta australiasae y lo que encontré fue Shelfordella lateralis, que ni siquiera me había planteado que pudiera estar en al Península Ibérica instalada [2]. Si uno se pone en modo búsqueda, las cosas van llegando. No hace falta que sea nada espectacular. Desde que observo al lepismátido Ctenolepisma longicaudata, he podido ver cómo se va expandiendo, cuándo cría, dónde se esconde, cómo coloniza otros inmuebles y también cómo desplaza a otras especies como Lepisma saccharina. Al común de la población le trae al pairo la vida y costumbres de C. longicaudata, pero a mí me interesa. Además tiene una aplicación inmediata en mi trabajo. Hay tan poca gente interesada que todo lo que uno aprende es nuevo. Seguro que lo encuentras en lugares donde antes no se había visto.
Localización de V. orientalis
Siguiendo con el factor suerte, el pasado jueves 8 de septiembre encontré un avispero de Vespa orientalis en el puerto de Barcelona. Es el primero del que tengo noticia para el noreste de la península. Y así ha sido confirmado por expertos. Cabe la posibilidad que esta especie haya llegado antes y esté instalada, pero nadie la ha reportado. Por tanto, se trata de la primera cita de V. orientalis para Cataluña [3].
Parte de mi trabajo se desarrolla en el Puerto de Barcelona, ya que la empresa donde trabajo se hace cargo de prestar servicios de control de plagas. Es un lugar muy interesante por la circulación de mercancías. Es uno de puertos más importantes de España. Sin embargo, en la actualidad el transporte se realiza principalmente en contenedores. Así que la llegada de especies exóticas se encuentra básicamente en el destinatario del contenedor. Controlar la llegada de especies exóticas tal y como funciona el mundo en la actualidad es misión casi imposible, porque no se puede controlar todo lo que va en contenedores. Y su control se centra a unos pocos que básicamente tienen que ver con transporte de alimentos. Y normalmente, con contenedores de países con los que no haya acuerdos.

Fig 2. Desde el interior de la ventana donde estaba ubicado el avispero de V. orientalis./ C. Pradera 09-2022
Desde mi punto de vista, el acento no se ha de poner en la detección de especies en los barcos, contenedores o como sea que lleguen, sino en la detección precoz en tierra. Esto significa un sistema de avisos rápido y eficaz. Si se detecta rápido, cabe la posibilidad de que se pueda erradicar. Aunque no todo es erradicable de momento como hemos constatado con Vespa velutina cuya llegada y expansión por Europa es una invasión biológica en toda regla. En el caso de España, creo que la Administración no está preparada más que para algunos grupos de insectos como los culícidos. Pienso en el caso que estamos viviendo con la hormiga Wasmannia auropunctata [4]. Es la hormiga exótica más peligrosa que tenemos hasta la fecha, con afectación sobre la salud de las personas y los ecosistemas. Tenemos detectados tres focos, pero ninguna Administración ha hecho algún tipo de movimiento para su control.
Visto lo anterior, es toda una suerte que el avispero de V. orientalis estuviera en el mismo puerto, ya que podrían haber llegado reinas a otro punto de la ciudad o incluso del interior. Es probable que llegara una reina refugiada en un barco, y no en mercancías, procedente de otros puertos del Mediterráneo donde se ha establecido o de donde es nativa. Todo empezó con un aviso, un par de días antes, por presencia de abejas en un edificio del Muelle de Inflamables. Me pareció raro que fuera por abejas. Y como estamos a costumbrados a que se confundan abejas y avispas, pensé que se trataría de una colonia de avispas, ya fuera de V. velutina, la avispa asiática, o de Vespula germanica.
Cuando llegué al pie del edificio, miré hacia la ventana en cuestión donde se suponía que estaban las abejas (figura 1). Pero en efecto se trataba de avispas. Vi una que llevaba una presa y se metía por un agujero. Pensé en V. velutina. Las vi entrar en el cajón de la persiana a unos 6 metros de altura. La ventana tenía orientación este. Entré en las oficinas y pedí si me podía acercar a la ventana. Quise mirar por dónde entraban y hacerme una idea de dónde estaban ubidadas. La persiana estaba medio bajada. Así que lo primero que hice fue subirla un poco. Y cuando tiré de la correa, salieron obreras que nada más verlas vi que eran V. orientalis (vídeo 1). Es una especie con unos colores y patrón característicos. El avispero debía estar construido en poco espacio, así que al subir la persiana rompí un poco de la cubierta. En el vídeo se puede ver una obrera que intenta recuperar un trozo de cubierta. La persiana llevaba meses sin ser subida.
Hecho el diagnóstico, lo primero fue pensar en su eliminación. Avisé a los responsables del puerto y hablé con el responsable técnico de la empresa donde trabajo. Esa misma noche debíamos eliminar el avispero. Aunque V. orientalis tiene una biología diferente a la de V. velutina, no sabía exactamente si había la posibilidad de que hubieran reinas que se pudieran escapar al tratamiento. Lo lógico era actuar rápido, teniendo en cuenta el potencial peligro de esta especie según lo reportado por Leopoldo Castro y Carlos del Pico en 2021 [5]. Actuamos siguiendo el protocolo para V. velutina. Usamos el traje de protección especial para tratar esta avispa. La hora de actuación fue tras la puesta del sol. En ausencia de luz, V. orientalis permanece inactiva.
El avispero
En la imagen número 4, se puede ver el avispero adaptado al espacio disponible. Esta especie busca principalmente lugares a refugio que pueden ser tanto bajo el suelo como en huecos naturales. Un edificio es un buen lugar donde se puede instalar. La colonia es menos numerosa que la de V. velutina. Allí donde la reina fundadora construya el avispero embrionario, se adaptará al espacio disponible hasta que la colonia madure y salgan los reproductores. Después del tratamiento nos dedicamos a recoger todos los individuos que encontramos. En total fueron 190. Algunos escaparon al tratamiento. Y otros más debieron quedar muertos en lugares inaccesibles.
Un aspecto interesante del avispero se puede ver en la imagen número 5. Está el panal tal y como lo sacamos del cajón de persiana. Básicamente es un gran panal del que cuelgan dos pequeños panales. Hay celdas de dos tamaños. Las pequeñas están destinadas a la cría de obreras y de machos (figura 6). Y las grandes son para la cría de reinas (figuras 7-8). Esto se puede ver más claramente en las imágenes 9 y 10 donde hay celdas de reinas y obreras juntas. A medida que madura la colonia, empiezan a construir las celdas para reinas. He contado cerca de 200 celdas para reinas.
Las celdas de reinas estaban ocupadas la mayoría por huevos, larvas y pupas. No había ninguna celda de reina que indicara que había salido alguna. Ahora bien, guardamos el panal para su observación. El pasado jueves vi que una reina había roto la cubierta de seda (figura 11). Estaba esperando la ocasión. La ayudé a salir (figura 12). Hice lo mismo con una obrera. Tras unos días dejando que tomaran color, las he colocado una junto a la otra para que se aprecie el tamaño (figuras 13 y 14). Esta diferencia de tamaño tan evidente no sucede con V. velutina. Las reinas son más grandes que las obreras. Pero solo es observable las diferencias cuando la colonia es inicial y las obreras son más pequeñas.
Biología
La biología de esta especie ha sido tratada por Archer [6]. Y en la península ha sido completada por las observaciones de Castro y del Pico en 2021 [5]. Es una especie que se distribuye por Asia central, noreste de África y el Mediterráneo oriental: sur de la Península Itálica, Sicilia, Malta, Creta, Chipre, Balcanes y Crimea. En la península Ibérica se ha introducido en las provincias de Valencia, Cádiz y Málaga. Preocupa su expansión por el sur de la península que está siendo rápida. Ha sido introducida en otras zonas de Europa como Marsella (Francia), Trieste (Italia) y Bucarest (Rumania), así como a otras partes del globo como Chile. Tiene por tanto un gran potencial de adaptación.
La colonia es anual y sigue el mismo patrón que otros véspidos del género Vespa o Vespula que tenemos en nuestra zona. En primavera una reina funda la colonia y en otoño se produce la dispersión de reinas. Entre medio, se suceden las obreras con una vida media de 12-64 días. En otoño, la colonia puede llegar hasta las 430 obreras. La cópula se produce entre octubre y noviembre. Respecto al número de reproductores, se da el máximo número de 260 reinas y 263 machos. Como he apuntado, el panal tenía cerca de 200 celdas para reinas. Fue eliminado a principios de septiembre y todo apunta a que se hubieran construido más. En las celdas para obreras criar hasta tres veces y en las de reina solo una.
Respecto al lugar donde estaban, parece bueno para V. orientalis como se ha visto en Cádiz. Las obreras buscan proteína animal para alimentar a las larvas. A falta de insectos que depredar, encuentran lo que necesitan en la carroña. Cerca de la costa encuentran peces muertos que es lo ideal para hacer un muestreo.
Para finalizar, dejo apuntado lo evidente. Se trata de la primera detección de esta especie en Barcelona. No será la última en esta parte de la península. Sabemos que llegará y se instalará. ¿Con qué densidad? Esto lo dirán estudios que determinen las condiciones óptimas para su desarrollo. Por otra parte, hay otras especies del género Vespa que pueden instalarse. En Málaga se encuentra en expansión V. bicolor desde el 2013. Aunque su expansión en la zona es lenta, quizás en otra zona encuentre mejores condiciones.
Notas:
[1] Espadaler, X. & Pradera, C. 2016. Brachymyrmex patagonicus (Mayr, 1868) y Pheidole megacephala (Fabricius, 1793), dos nuevas adiciones a las hormigas exóticas en España. Iberomyrmex, 8: 4-10.
[2] Pradera, C. & Carcereny, A. 2018. Primera cita de dues noves espècies exòtiques de paneroles (INSECTA: BLATTODEA) per a la península Ibèrica: Pycnoscelus surinamensis (Linnaeus, 1758) y Blatta lateralis (Walker, 1868). Butlletí de la Institució Catalana d’Història Natural, 82: 23-24.
[3] Pradera, C., Vila-Mani, R. & Puig-Pujols, M. 2022. Primer registre de la vespa exòtica Vespa orientalis L. (Hymenoptera: Vespidae) a Catalunya. Butlletí de la Institució Catalana d’Història Natural, 86(3): 117-119.
[4] Espadaler, X., Pradera, C., Santana, J. A. & Ríos Reyes, A. 2020. Dos nuevas poblaciones europeas de la pequeña hormiga de fuego, Wasmannia auropunctata (Roger, 1863) (Hymenoptera: Formicidae) en Andalucía (España). Boletín de la Sociedad Andaluza de Entomología, 30: 189-192.
[5] Castro, L. & del Pico, C. 2021. Sobre el problema de Vespa orientalis Linnaeus 1771 (Hymenoptera: Vespidae) en el sur de España. Revista gaditana de Entomología, 12: 183-206.
[6] Archer, M. E. 1998. Taxonomy, distribution and nesting biology of Vespa orientalis (Hym., Vespidae). Entomologist’s Monthly Magazine, 134: 45-51.

Fig 13. Reina (izquierda) y obrera (derecha) de V. orientalis que está saliendo./ C. Pradera 09-2022
Muchas gracias por el artículo! Las V. orientalis son impresionantes, hace poco leí que se empezó a utilizar el extracto de sus larvas como suplemento deportivo por lo nutritivo y proteico que es. Volviendo a la intro, hay alguna posibilidad de un post con consejos para discernir los Lepisma saccharina de los Ctenolepisma longicaudata? Me cuesta mucho diferenciarlos. Gracias
Hola. Lo tengo en cuenta. Gracias por tu comentario.