C. Pradera, Barcelona, 21-08-2019
He de agradecer a mi mujer lo mucho que me ayuda. Entre sus virtudes se encuentra la observación. La semana pasada encontró delante de la parada del autobús, en Santa Coloma de Gramenet, un murciélago muerto. Sabe que me interesan. Así que lo guardó para que lo observara. No tengo la oportunidad de ver murciélagos de cerca. Los observo de noche aleteando junto a las farolas. Escucho sus chasquidos. Veo los excrementos que indican donde están cobijados. Y de vez en cuando, encuentro alguno muerto que guardo en un cajón. Me sabe mal encontrar un murciélago muerto. Les tengo mucho aprecio.
Yo no soy experto en quirópteros. Tan solo curioso. Así pues, describiré lo que se puede ver las imágenes. Son todas del individuo encontrado, una hembra de murciélago enano (Pipistrellus pipistrellus) [1]. Se trata de una de las especies más pequeñas de Europa junto al murciélago de Cabrera (Pipistrellus pygmaeus) [2]. Ambas especies son muy parecidas en aspecto y comportamiento. Están distribuidas por toda Europa desde el nivel del mar hasta alta montaña. Y son comunes en medio urbano y periurbano. Ocupan los mismos lugares de descanso. Son fisirículas. Es decir, pueden ocupar agujeros y grietas en árboles, rocas, edificios, etc. De hecho, los edificios proporcionan un buen lugar de refugio donde se pueden instalar en cualquier lugar donde se sientan seguros. Toleran bien las altas temperaturas y es por ello que se instalan bajo cubiertas. Los individuos de ambas especies son cazadores aéreos de insectos de vuelo nocturno como dípteros, tricópteros y efemerópteros. La edad media es de 4-5 años.
Respecto a la hembra de las imágenes, se trata de un individuo adulto, ya que tenía el antebrazo de unos 32 mm de largo. Además, tenía más de un año de vida, ya que la dentadura me pareció que tenía un buen desgaste. Para la identificación de la especie, me basé en las claves de C. Dietz & O. von Helversen [3]. No es fácil identificar murciélagos y, menos, los del género Pipistrellus. Llegué a este género al tener en cuenta el tamaño, la forma de la cara, la pequeñas orejas y el lugar donde fue encontrado. El medio urbano reduce enormemente la especies en juego. Luego, al observar la dentadura, pude ver que tenía el primer incisivo superior con dos cúspides (figura 2). Así que tenía una de las dos especies mencionadas. Sin embargo, la distinción entre ambas es difícil. Por suerte, pude desplegar el ala y observar las celdas de la membrana alar. En ambas especies hay una celda no dividida que conecta el primer empalme del quinto dedo con el codo. Ahora bien, en P. pipistrellus la siguiente celda, más cercana a la muñeca, sí se encuentra dividida (figura 3).
Notas:
[1] Ángel Guardiola & M. Pilar Fernández. Pipistrellus pipistrellus (Schreber, 1774). Murciélago enano. Capítulo en: L. Javier Palomo, Julio Gisbert & J. Carlos Blanco. 2007. Atlas y Libro Rojo de los Mamíferos Terrestres de España. Ministerio de Medio Ambiente, Madrid.
[2] Ángel Guardiola & M. Pilar Fernández. Pipistrellus pymaeus (Leach, 1825). Murciélago de Cabrera. Capítulo en: L. Javier Palomo, Julio Gisbert & J. Carlos Blanco. 2007. Atlas y Libro Rojo de los Mamíferos Terrestres de España. Ministerio de Medio Ambiente, Madrid.
[3] C. Dietz & O. von Helversen. 2004. Claves de identificación ilustradas de los murciélagos de Europa. Publicación Electrónica Versión 1.0 Primera Revisión 15/02/2004.

Fig 8. Vista frontal de la cara de un murciélago enano Pipistrellus pipistrellus./ C. Pradera 08-2019