He tenido la oportunidad de leer el último número de Infoplagas, la revista de la Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (ANECPLA). Como se desprende de la portada (figura 1) esta asociación ha cumplido 25 años desde su fundación. Se trata de la asociación más importante del sector de control de plagas.
Me ha parecido muy interesante el artículo titulado ‘Análisis de los logros de ANECPLA por los Presidentes de la Asociación.’ Recomiendo su lectura. Se trata de una sucesión de escritos de cada uno de los presidentes donde expresan su opinión de los logros conseguidos durante el tiempo que ostentaron la presidencia. Sin embargo, algunos de estos presidentes no se han ceñido a mostrarse triunfales, sino que también han expresado una opinión crítica sobre lo que quizás esta asociación no ha hecho bien. Voy a destacar tres párrafos en los que estas personas muestran su preocupación por el actual estado del sector. Para aquellos que no tengan acceso a la revista, he reproducido el artículo en formato pdf al final de este escrito. Veamos.
El primer párrafo que me interesa es de Luis Muñoz Pattier, fundador y primer presidente entre 1992 y 1995. Es el texto más crítico de todos. Me gusta su atrevimiento. Dice así: «En estos momentos, mi perspectiva es que el sector se está hundiendo. Uno de los objetivos era ayudar a una regulación en beneficio del sector y del negocio. Pasados los años, en el mercado sigue habiendo una guerra de precios y además tenemos una regulación desmedida que puede llevar a la destrucción por imposibilidad; en mi opinión, a diez años la regulación que hay se deroga por incumplible.»
El segundo párrafo es de Alejandro Martínez Peña, tercer presidente entre 1999 y 2003. Es también muy crítico sobre la evolución del sector. Dice así: «Actualmente, el sector se ha atomizado mucho, y tengo una visión un tanto negativa sobre la proliferación de una normativa impuesta y no contestada con la fuerza y oposición inicial y creo que eso complica el día a día; cualquier empleado precisa varios carnés con una misma base de formación, en una espiral de titulaciones, normativas, acreditaciones y cursos que no existe parangón en ningún otro sector, y no hay ninguna respuesta contundente de los profesionales del sector que somos nosotros y creo nos va a afectar negativamente en un futuro muy próximo.»
Y el tercer párrafo es de Felipe Rivera Quero, quinto presidente entre 2007 y 2011. Es menos crítico, pero expone la problemática que ve venir. Dice así: «En el marco profesional, estamos en pleno periodo transitorio entre los antiguos carnés de capacitación a los Certificados de profesionalidad, lo que genera, también, cierta incertidumbre una vez termine este periodo, al no saber si el mercado laboral va a tener a su disposición suficientes técnicos.»
Encuentro muy valioso lo que escriben estas tres personas del sector. Se han salido del guión y han expuesto con sinceridad la problemática latente que hay en el sector. Estoy bastante de acuerdo con lo que exponen. Llevo bastante tiempo dándole vueltas a la situación en la que se encuentra el sector. Y no me gusta cómo se han resuelto algunas cuestiones.
Voy a exponer una de las cuestiones que más problemas puede ocasionar al sector. Se trata de cómo se ha resuelto la formación para acceder a la profesión. Creo que no tiene parangón con ningún otro país que nos rodea. Por lo que tengo entendido, en Italia, Francia y Portugal, ni siquiera existe un carnet de técnico aplicador de tratamientos DDD. No digo que esto que ocurre en estos países sea lo correcto. Pero es que en España se ha legislado sin conocimiento. Y hemos pasado de una formación de 25 horas a otra de 370. Hasta el pasado año, una empresa contrataba a un trabajador y le pagaba la formación. Podía asumirlo. Ahora, el trabajador ha de venir formado porque es inasumible para cualquier empresa formar a un trabajador en estas condiciones. ¿Cómo se forma este trabajador? En estos momentos a través de cursos destinados a personas en paro. Hemos de tener en cuenta que nuestro sector no es muy emocionante y no invita a que una persona se pague la formación para acceder a él. Y menos con los sueldos que se están ofreciendo.
En consecuencia, me temo que va a haber un gran desajuste. Por una parte, nuestro sector es cíclico como el turístico. Cuando aprieta el calor y llaman los clientes es cuando más trabajo tenemos. Es entonces cuando se contrata más mano de obra. Si a esto le sumamos que, tradicionalmente, había una importante rotación de personas, la problemática está servida rápidamente. Por otra parte, los datos macroeconómicos pintan muy bien. Las cifras que ofrece la exportación son muy buenas. Pero mejores las cifras de llegada de divisas a través del turismo. Además, hace unas semanas se anunció que la construcción volvía a ser uno de los motores de la economía. Toda esta bonanza se ha visto reflejada en nuestro sector. Hablando con otras personas que trabajan en control de plagas me dicen que este último año les ha ido bien y que están a tope de trabajo. Por tanto, nuestro sector crece y necesita técnicos.
Hoy mismo he consultado con una persona que recientemente finalizó el curso para obtener el Certificado de Profesionalidad de Nivel 2 de Biocidas aquí en Barcelona. Le he preguntado cuánta gente lo había cursado y cuánta gente lo había acabado. Me ha dicho que eran unos 15 y que tres o cuatro han abandonado. Teniendo en cuenta que en Cataluña se imparte el curso en tan solo dos lugares, he hecho número y creo que las personas formadas son menos de las que se van a necesitar esta temporada. Así que auguro que estas personas van a tener el trabajo asegurado. De seguir la cosa así, también auguro que, si no mejoran los sueldos, posiblemente haya empresas que pierdan trabajadores.
Pero además de este tema, existen otros muchos que me preocupan. Me entretendré en lo sucesivo a tratarlos con la voluntad de que sirvan para el debate. Porque, ¿hay debate?
Fuentes:
– Análisis de los logros de ANECPLA por los Presidentes de la Asociación. Infoplagas, nº 74, abril de 2017, pp 12-18.
Una vez más, gracias desinsectador por ponerle tinta a mis pensamientos y sobretodo por dar voz y difusión de cosas que nos preocupan o interesan a las personas del sector.
En Baleares ya estamos padeciendo la problemática de falta de aplicadores formados, hasta hace poco podía contratar a Biólogos y C. Ambientales, mientras que en la actualidad, gracias a la incoherente interpretación del RD por la Abogacía del Estado, solo podemos contratar a Técnicos Superior en Salud Ambiental o personas con experiencia, lo que estimo que supone un 25% del personal contratable que teníamos para tal función, asumiendo ya su formación de unas 80 horas.
Si a esto le sumamos el coste de vivienda que estamos sufriendo en Ibiza y Formentera puedes hacerte una idea de las peripecias que tenemos que hacer para sacar adelante una temporada turística que se espera muy fuerte, … eso si, en noviembre todos a casa de nuevo y aquí quedamos 4 gatos.
Ayer se incorporó en nuestra empresa un nuevo miembro que hemos tenido que traer de Ceuta para trabajar en Ibiza, a quien además hemos tenido que facilitar alojamiento digno para poder descansar entre duras jornadas de trabajo.
A pesar de ello valoro positivamente una mayor formación para el sector, las responsabilidades que asumimos los Responsables Técnicos y empresarios crecen día a día. Es más fácil garantizar o confiar en su cumplimiento cuando el candidato tiene experiencia o ha tenido una formación mayor.
Saludos
La situación que describes se repite en otras lugares. Recientemente me comentó una persona que tenían un gran crecimiento a la vista y no lo podrían cubrir por no encontrar personal. Saludos.
Acabo de finalizar el Certificado de Profesionalidad ‘Gestión de servicios para el control de organismos nocivos’ (a falta de hacer las 80 horas prácticas, para que me otorguen el diploma y título correspondiente), son cerca de 500 horas en total para ser Responsable Técnico, y el responsable del centro en el que lo he realizado me comentó la semana pasada que debido a la carga alta de trabajo que tienen las empresas del sector están algo saturadas y no pueden hacerse cargo de una persona en prácticas por el momento, aún así me indicó que se llevarían a cabo las prácticas. Además, con dicho certificado de profesionalidad se otorga (enviando los documentos que acrediten la realización de la parte teórica y de la parte práctica al departamento respectivo del Gobierno Vasco, en mi caso) el carné de Fitosanitario cualificado.
Eramos 11 personas en el curso, de las cuales 6 trabajaban ya en el sector. En el mismo municipio vizcaíno se ofreció, por las mismas fechas, el mismo curso en un Instituto de Formación Profesional y se tuvo que suspender por falta de candidatos. También se realizó el curso de aplicador en dicho Instituto, pero por partes: no sé si por módulos o por unidades formativas. Mirando en la lista que Lanbide (Servicio de Empleo en Euskadi) saca cada año de cursos de formación, este año 2017 se llevará a cabo el de aplicador (no recuerdo el nombre que le otorgan, creo que es algo de control de plagas), pero no el de formación para responsable técnico.
PD: Una de las primeras informaciones que nos dio el profesor fue una lista de diversas revistas, asociaciones y páginas webs sobre el tema de control de plagas, entre ellas estaba su página, la cual es una gran ayuda para alguien como yo que ha empezado de cero en este mundo.
Buen dia, soy Espanol, llevo en el sector de plagas 35 anos, resido en Republica Dominicana donde dirijo las operacion en control de plagas de la empresa Quimocaribe, Ecolab, principalmente en los Resort de la zona Bavaro Puntacana. El sector aqui esta como fue España en los anos 90, no hay regulación, no hay normativas, en fin vastate desastre para que se hagan una idea, las empresas en su mayoría mochileros siguen aplicando organofosforados en interior de instalaciones. llevo 5 anos y ha sido como empezar a vivir de nuevo todos los líos que tuvimos haya en los 90.
Saludos a todos
En Canarias nos pasa igual. Es complicado conseguir técnicos. Hay mucha gente interesada, pero claro, no tienen formación.
La organización de certificados de profesionalidad y formación es indignante en este sector. No sé si alguno de vosotros ha participado en la obtención del certificado de profesionalidad. Es una lástima ver el poco respeto que nos tienen. No les sobra con que tengamos que certificar y acreditar los conocimientos y profesionalidad que tienes (lo que veo lógico), para la obtención del nuevo certificado, sino que con el «cachondeo» de las diferentes comunidades autónomas y el «negocio» en el que se ha convertido la formación (nos utilizan una vez más), se transforma en una odisea obtenerlo. He participado en el de Murcia y he podido comprobar que se tenía que desplazar gente desde toda España, visitas para asistir un par de horas, en días diferentes. (Ceuta, Barcelona, Madrid, Valencia, etc, etc.) Nadie se dá cuenta que los profesionales del sector somos nosotros, que hemos de hacer grandes esfuerzos para corregir su incompetencia a la hora de dar salida a todos los técnicos que necesitan acreditar su formación, que desde el 2010, tenían tiempo suficiente para una buena organización y que esto no pasara. Saquen cuentas señores. Tasa 70 €+-, días empleados para la certificación 1 visita obligada + 2 visitas de asesoramiento + 1 visita del resultado de asesoramiento + 1 visita de evaluación. Según desde donde te desplaces, en mi caso: Noches de hotel 1 = 50 euros + Coste de oportunidad (días laborales perdidos + salario de esos días= 500 +-), a esto se le suma el combustible (avión o autobús, según casos), dietas, etc, etc.
Vamos que podemos estimar que para certificar lo que ya sabes te cuesta una media de >500 €.
Una vez más quiero agradecer tanto a las comunidades autónomas, como a las asociaciones que tan bien nos defienden, el que velen por nosotros y se pongan en nuestra piel.
Por un sector digno de control de Plagas.