C. Pradera, Barcelona, 16-12-2023
He encontrado tres calendarios de bolsillo de la compañía de control de pagas J. Lucena S.L. de Málaga. Pertenecen a los años 1970, 1971 y 1972 (figuras 1, 3 y 4). En la actualidad ha caído en desuso la edición de este tipo de calendarios. Antaño era común que toda empresa, asociación o institución emitiera a finales de año su calendario personalizado. Era un regalo publicitario económico y necesario para clientes. Se veían por todas partes y no faltaba uno en la cartera de cualquier persona. Había quien los coleccionaba, ya que algunos tenían imágenes de gran belleza que los hacía atractivos. Esta imagen atractiva estaba en el anverso y el calendario en el reverso. En algunas ocasiones, la empresa se publicitaba de manera discreta bajo el calendario en el reverso. Y otras lo hacía en el anverso con algún reclamo publicitario.
En el caso de los tres calendarios de J. Lucena S.L., en el anverso no aparece imagen alguna relacionada con la empresa ni tan siquiera un logotipo. Simplemente aparece una descripción de los servicios de desinfección, desinsectación y desratización (DDD). Los calendarios no buscan el reclamo, sino que sonun anuncio publicitario directo quizás con la idea de que sirvieran como tarjeta de visita. Es cierto que los calendarios de empresas de servicios útiles eran guardados por contener los teléfonos. El del electricista, fontanero o del taller de mecánica de autos eran importantes. Seguramente se guardaran en un cajón cerca del teléfono y junto a la agenda telefónica. El tamaño de los calendarios es el clásico de 6,5 x 10 cm. Fueron impresos por la Imprenta Zambrana situada en el pasillo Atocha número 6 de Málaga.
No tengo casi datos de J. Lucena. Aparece en la lista de 1964 publicada en el BOE con las empresas autorizadas para la desinfección y desinsectación (figura 2) [1]. Esta lista es la continuación de la publicada en 1961, cuando la normativa solicitó en 1959 a todas las empresas de desinfección y desinsectación que se inscribieran en la Dirección General de Sanidad [2]. En Málaga a mediados de la década de 1960 operaban tres empresas autorizadas: Aerosol, Desur y Lucena Morales [3]. Esta obligación de estar inscritas no regía para las empresas que realizaban operaciones de desratización.
He buscado información, pero no hay nada más. En el listado de 1964, la empresa tiene la denominación de Lucena Morales y la dirección en la Desviación del Arroyo de la Manía número 9 de Málaga. En los calendarios, la denominación es J. Lucena S.L. y la dirección en la calle Álamos 25 de Málaga. Entiendo que se trata de la misma compañía porque en el calendario de 1972 se menciona el hecho de que está «autorizada oficialmente». Esto es cierto a medias, ya que hacia mediados de 1965 quedaron derogadas las leyes que obligabana la periodicidad de los tratamientos en establecimientos de pública concurrencia, la formación de su personal y a la obligatoriedad de estar registradas [4]. Digamos que el mercado se liberalizó. Otro dato que he encontrado es que J. Lucena S.L. tenía el NIF B29009982. Desconozco hasta qué año estuvo operando.
Respecto al contenido de los calendarios, es interesante ver qué remarcaban, puesto que eso es lo que suponemos que buscaban los clientes que contrataban los servicios de control de plagas de la época. Teniendo en cuenta la terminología de la época, las empresas de servicios de DDD eran denominadas también empresas de desinfección. Por tanto, posiblemente fuera conocida la empresa como Desinfecciones J. Lucena o simplemente Desinfecciones Lucena. Desconozco a qué nombre correspondía la letra jota. No he encontrado ningún dato.
En los calendarios, la empresa se publicita como dispuesta a cualquier servicio de DDD. Es interesante que aparecen los tópicos de nuestro sector. Estos son: garantía total, productos inmejorables, personal técnico, presupuesto gratuito y sin compromiso, servicios rápidos y de urgencia. Para garantizar la calidad del servicio en el calendario de 1971 aparece «productos de absoluta garantía y personal ténico con mucha experiencia en estos trabajos». En cuanto a las palabras para definir nuestra actividad aparece ‘exterminio’. La palabra ‘control’ fue utilizada muy posteriormente. Cuando empecé en este oficio el cliente no entendía «control de plagas». Nosotros éramos exterminadores.
Para acabar, es interesante destacar el calendario de 1972. Es diferente a los anteriores, ya que es más simple y claro. Por primera vez aparece una plaga que en aquella época solo podía interesar a gente de dinero, es decir, las hormigas. Se puede leer «exterminio de hormigas y tratamiento de jardines». Esto significa que esta plaga era solicitada por propietarios de viviendas con jardín. Es un dato importante. En aquella época toda la publicidad estaba dirigida hacia la desratización y desinsectación de cucarachas de comercios, restauración y otras empresas. Sin embargo, el control de hormigas, tan demandado en la actualidad, empezó a ser solicitado por lo que denominamos sector residencial.
Notas:
[1] Resolución de la Dirección General de Sanidad de 10 de marzo de 1964 por la que se transcribe la relación de Empresas de desinsectación autorizadas hasta el 31 de diciembre de 1963. Ministerio de la Gobernación. Boletín Oficial del Estado, núm. 94, de 18 de abril de 1964, páginas 4909 a 4910.
[2] Resolución de 9 de enero de 1961 de la Dirección General de Sanidad por la que se publica la relación de Institutos Provinciales de Sanidad, Laboratorios Municipales y Empresas privadas que han sido autorizados para realizar trabajos de desinsectación de locales y medios de transporte. Ministerio de la Gobernación. Boletín Oficial del Estado, núm. 28, de 2 de febrero de 1961, páginas 1654 a 1655.
[3] C. Pradera. 04-02-2015. Un poco de historia sobre Aerosol SA. El desinsectador y desratizador.
[4] Decreto 2274/1965, de 15 de julio, por el que se establecen nuevas normas para las operaciones de desinsectación de los establecimientos de uso público. Ministerio de la Gobernación. Boletín Oficial del Estado, núm. 194, de 14 de agosto de 1965, páginas 11400 a 11401.



