C. Pradera, Barcelona, 12-06-2014
Paseando por el Delta del Llobregat encontré una hormiga de terciopelo (figuras 1 a 3). Corría rápido sobre el suelo. Aunque de lejos pueda parecer una hormiga, si la observamos de cerca nos damos cuenta de sus diferencias. La ausencia de un peciolo y de gran cantidad de pelos nos hace sospechar de que se trata de otra cosa. El nombre genérico de hormiga de terciopelo describe los himenópteros pertenecientes a la familia de los mutílidos (Mutillidae). Y más en concreto, describe a las hembras, ya que son ápteras. No es difícil encontrar una hembra que salta a la vista por su vellosidad de colores contrastados: rojo, negro, blanco. El macho está provisto de alas y es difícil de ver. Además de la presencia de alas, el macho suele tener una coloración diferente.
El macho vuela para encontrarse con la hembra. Cuando tiene que depositar un huevo, busca un nido de abeja o avispa solitaria. La larva de mutílido se irá alimentando poco a poco de la larva que parasita hasta completar su desarrollo. Se trata, pues, de un ectoparasitoide. Los adultos se alimentan de néctar.
Los mutílidos se encuentran en todas las regiones del mundo. En la Península Ibérica hay un buen número de especies. Los manuales destacan que la picadura de estas avispas es bastante dolorosa. Sus colores llamativos nos advierten del peligro. El individuo de las fotografías pertenece a la especie Ronisia barbarula.
Addenda. Añado 7 imágenes (figuras 4 a 10) de un mutílido encontrado en el Delta del Ebro en septiembre de 2020. Se trata de un individuo de la especie Nemka viduata. También añado 3 imágenes de dos machos de mutílido encontrados en una lámina adhesiva de una trampa lumínica para captura de moscas (figuras 11 a 13). Esta trampa estaba en el interior de un edificio del Prat de Llobregat, Barcelona.