Imágenes de acumulación de objetos por Síndrome de Diógenes

C. Pradera, Barcelona, 09-02-2013

Me parece extraño que se haya bautizado con el nombre de Diógenes de Sínope un transtorno de la mente que lleva a la persona afectada a hacer justo lo contrario de lo que predicaba este filósofo griego de la escuela cínica. Diógenes defendía el hecho de desprenderse de toda propiedad como ideal para conseguir la virtud. En cambio, las personas afectadas por el Síndrome de Diógenes hacen lo contrario. Estas personas van acumulando objetos bajo una premisa que solo su mente justifica. En su mayoría, son personas de edad avanzada que viven solas y que están afectadas por un cuadro depresivo. Este trastorno del comportamiento implica un abandono de la persona en el propio hogar donde se aísla de la sociedad y en el cual acumula objetos, basuras y desperdicios.

El pasado martes día 5 de febrero de 2013, a un compañero de trabajo se le encomendó realizar una desinsectación en un piso de una persona que padecía este trastorno en la ciudad de Barcelona. El caso es que la persona que había ido acumulando tantas cosas en su piso que se quedó inesperadamente en la calle. Un día, al salir de su casa, se derrumbaron los objetos apilados y atrancaron la puerta del piso. Esto nos hace imaginar la gran cantidad de objetos que había ido acumulando.

Los vecinos llevaban tiempo intentando hacer algo. No es fácil incapacitar a una persona. Mientras tanto, el piso se llenaba de objetos y de cucarachas. El piso estaba a cinco alturas de la calle. Allí convivía cucaracha germánica (Blattella germanica) con cucaracha americana (Periplaneta americana). Los olores que emanan de una vivienda en tales condiciones son fuertes. Recuerdo el caso de un piso cuyos malos olores se percibían desde la calle en verano. Esto afecta seriamente a la vida de los vecinos. Las administraciones deberían ser más ágiles en este tipo de casos.

El pasado martes, acceder al piso fue un poco de película. Tuvo que descolgarse una persona por la fachada del edificio. Aprovechó una ventana abierta para entrar y, caminando por encima de montones de objetos, abrir la puerta. Espero que las fotografías que acompañan a esta entrada sirvan para hacerse una idea del tremendo problema generado. Las tres primeras fotos las hizo mi compañero el mismo martes. Las dos últimas las hice yo ayer viernes cuando el piso estaba un poco más vacío. Hay que tener en cuenta, para valorar la cantidad de objetos acumulados, que el piso era de más de 100 m2. Se trata de un piso de una finca antigua en el barrió barcelonés del Eixample, de aquellos que van desde la calle hasta el interior de manzana.

Fig 1. Imagen de lo que se veía cuando se pudo abrir la puerta poco más de medio metro./ E. Pujante 02-2013

Fig 2. Imagen del pasillo con acumulación de objetos./ E. Pujante 02-2013

Fig 3. Imagen del pasillo con objetos acumulados./ E. Pujante 02-2013

Fig 4. Imagen de la sala de estar donde se acumulaban la mayor parte de los objetos. Esta foto la hice 3 días después cuando habían retirado 1/4 parte de los objetos acumulados./ E. Pujante 02-2013

Fig 5. Imagen del nivel de basura acumulada en la cocina. Esta foto la hice 3 días después cuando el pasillo ya se había despejado./ E. Pujante 02-2013

Un comentario en “Imágenes de acumulación de objetos por Síndrome de Diógenes

  1. Julieta dijo:

    Se parece a mi compañera de piso, si pudiera subía fotos.
    El cuarto de invitados revuelto, con botellas, objetos rotos, basura por todos lados.
    En mi vida vi una persona tan sucia. Es patológico.
    Su baño igual, mierda por todos lados.
    Hasta llegué a ver restos de heces por diferentes zonas de la casa! ASCO!!!!
    Tengo miedo a infectarme algo aquí, aunque por otro lado mi sistema inmune debe estar haciéndose más fuerte día tras día 😦

    Cuando la reto mucho limpia.
    «no saldré más contigo a la calle hasta que no limpies»
    «me iré a vivir a otra parte, quédate sola»

    No entiendo esto, toda la basura la va dejando por la casa como si nada.
    No le molesta.
    Una vez la cocina llegó a tener tanta mugre que no se podía entrar, casi como en esas fotos.
    Platos y platos sucios, ollas y más ollas, envases…

    Tuve que llamar a la dueña.

    Espero que se muera un día y me deje en paz jaja dios!!

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