Fig 1. Imagen promocional de aplicación de insecticidas./ Callington Haven Pty Ltd

C. Pradera, Barcelona, 12-03-2015

He viajado muy poco en avión. Quizás, quienes hayan volado mucho habrán podido observar una situación que me resulta sorprendente. Y es el hecho de que en vuelo, con los pasajeros presentes y sentados en sus butacas, una azafata se pasee por la cabina brazo en alto pulsando un espray insecticida. En la imagen número 1, se puede ver una estampa promocional de una compañía fabricante de insecticidas para aviones llamada Callington [1]. Una simpática azafata alza sus brazos en posición de aerosolización, esto es, con los brazos al aire. Esta acción, que prohíben nuestras autoridades sanitarias en cualquier espacio cerrado y de uso público, no lo está si se hace en un avión, pues cuenta con el beneplácito de la OMS y de la IATA (International Air Transport Association) [2]. Sorprendente. De hecho, en los envases del insecticida de la marca que lleva esta risueña azafata se lee: «World Health Organisation aproved formulation to the disinsection of aircraft». Las formulaciones para desinsectar en vuelo reciben el nombre en inglés de aircraft insecticides.

Pues bien, yo de este hecho no sabía nada de nada hasta ayer cuando llegó a casa un paquete. Y llegó gracias a la generosidad de José Luis Pérez, un compañero de oficio que vive en Fuenlabrada. La semana pasada me escribió un correo donde decía que tenía un par de botes de insecticida que usan las compañías de vuelos que podrían ser de mi interés. Le di mi dirección y me lo mandó. Tenía curiosidad. Y cuando abrí el paquete me quedé maravillado. Sí señor, José Luis, son de mi interés. Gracias compañero.

En las imágenes 2, 3 y 4 se pueden ver los dos envases en distintas posiciones. Ciertamente son bonitos. En el bote de la izquierda, el de color blanco, aparece el nombre de W. K. Thomas [3]. Se trata de una compañía inglesa de suministros para catering en aviones. No me parece fabricado por esta compañía. Quizás se lo haga fabricar por otra. El contenido pesa unos 40 gramos y contiene un 2% del piretroide d-fenotrina. En la etiqueta se lee «World Health Organisation Formulation.» Importante es el hecho de que por seguridad la formulación no contenga productos inflamables.

Fig 2. Botes de insecticida para vuelos./ C. Pradera 03-2015

El bote de la derecha es mucho más interesante. Está fabricado por una compañía francesa llamada Produits Sanitaires Aéronaifs [4]. Parece que dedican mucho I+D a este tipo de insecticidas. Pero lo cierto es que no parecen disponer de ninguna tecnología de exclusiva. El contenido pesa unos 60 gramos y contiene un 2% del piretroide permetrina. En la etiqueta se remarca que es un «nonflamable aircraft insecticide.» En la parte posterior de la etiqueta se encuentran datos de interés. Por ejemplo, se dice que mata mosquitos y moscas hasta un máximo de 6 minutos después de ser aplicado. Su uso tiene que ser mientras que el avión esté en vuelo o antes del despegue. Y también que tiene que ser dispensado mientras se camina por la cabina. En la parte baja de la etiqueta aparece un cuadro donde se indica el número de botes a usar en la cabina de un avión dependiendo de su tamaño. En los más grandes, como es el caso de un A380, se indica que se han de usar hasta 7.

Fig 3. Botes de insecticida para vuelos./ C. Pradera 03-2015

Buscando en páginas oficiales he encontrado algo que aclara un poco la cuestión sobre el uso de insecticidas en vuelo. En un documento de 2012 Sanidad Exterior publicado en la página del Ministerio de Sanidad, se explica cuándo se ha de llevar a cabo la desinsectación de la aeronave [5]. Muchos países exigen que se desinsecte un avión que provenga de zonas en donde existan enfermedades transmitidas por mosquitos como el paludismo o la fiebre amarilla. Otros países como Australia, Nueva Zelanda o Jamaica exigen que se realice sí o sí la desinsectación en todos los vuelos. Para proceder a tales exigencias sanitarias se usan insecticidas específicos indicados por la OMS. Los tratamientos que se pueden llevar a cabo son los siguientes, según el documento referido del Ministerio (figura 5):

1/ Tratamiento de la cabina del avión con esprays insecticidas de acción rápida que se realiza antes del despegue del avión.

2/ Tratamiento de la cabina en tierra, antes de que los pasajeros suban, y usando un aerosol con un insecticida residual. Este tratamiento se complementa con uno adicional mediante un espray de acción rápida poco antes de aterrizar el avión.

3/ Luego está el tratamiento regular con un insecticida residual en todas las superficies de la cabina a excepción de las áreas donde se preparan alimentos.

En resumen, las autoridades sanitarias de cada país determinan cómo se debe realizar la desinsectación y en qué aviones procedentes de zonas de riesgo. Si estas aplicaciones insecticidas son útiles, otra cosa es, porque una persona puede llevar tales enfermedades de un país a otro aunque no haya mosquitos en la cabina. Caso aparte está el hecho de que hay mosquitos resistentes a los piretroides.

Para acabar, comentar que mientras escribía esta entrada, me he acordado de que en 2007 realicé un tratamiento en un avión. El caso era que habían detectado cucarachas. Al subir a bordo, me indicaron que eran pequeñitas y rubitas. No me imaginaba otra especie que no fuera la cucaracha germánica (Blattella germanica). Lo primero que hice es ir a la zona donde había alimentos almacenados. Busqué, pero no las encontré allí. Entonces me puse a buscarlas cerca por el suelo y las encontré debajo de la alfombra. Apliqué Maxforce Gel de Bayer con hidrametilnona. ¡Ay, cuánto añoro este producto! Por cierto, si alguien tuviera un  envase vacío de este producto, del primero y original, y quisiera desprenderse se lo agradecería.

Notas:

[1] Callington Haven Pty Ltd, 30 South Street, Rydalmere NSW Australia 2116, callingtonhaven.com

[2] Organización Mundial de la Salud. 2008. Reglamento sanitario internacional (2005): 2a Edición. OMS, Ginebra. 104 pp.

[3] Bunzl UK Ltd T/A WK Thomas, York House, 45 Seymour Street, London W1H 7JT, United Kingdom, wkthomas.com

[4] Produits Sanitaires Aeronefs, 1, rue de Lamirault, 77090 Collegien, France, psa-paris.com

[5] Ministerio de Sanidad. 2012. Viajes internacionales y salud (situación a 1 de enero de 2012). Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Madrid. 326 pp.

Fig 4. Botes de insecticida para vuelos./ C. Pradera 03-2015

Fig 5. Extracto de ‘Viajes internacionales y salud (situación a 1 de enero de 2012)’ pp 43-44.